El Consulado argentino en Nueva York fue el escenario de la reunión de la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, con representantes de las máximas autoridades sindicales mundiales, quienes le manifestaron su apoyo a la posición argentina frente al conflicto con los denominados fondos buitres.
Del encuentro, gestionado y organizado por el secretario de Relaciones Internacionales de la CGT, Gerardo Martínez, participaron el presidente de la Confederación Sindical Internacional (CSI), Joao Felicio; la secretaria General de la CSI, SharanBurrow; el secretario General de la Confederación Sindical de las Américas (CSA), Víctor Baez; y los representantes de la central obrera de los EE.UU. (AFL-CIO), CathyFeingold y de la Central de Trabajadores canadiense (CLC), Hassan Yussuff.
La representación argentina estuvo compuesta, además de la Presidenta y Martínez, por el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada y los secretarios generales de la UPCN, Andrés Rodríguez y de la CTA, Hugo Yasky.
Los representantes sindicales internacionales manifestaron su apoyo a la posición del gobierno argentino, fundamentando su pronunciamiento en la autodeterminación económico-financiera de los países y en priorizar las condiciciones de desarrollo socio-laboral de los países en vías de desarrollo.
Martínez, por su parte y en representación del sindicalismo argentino, expresó que: “no vamos a permitir que los trabajadores sean la variable de ajuste de las crisis económicas internacionales, que afectan a afectan a todos los pueblos en desarrollo”.
Agregó que “el apoyo brindado a nuestro país por las máximas autoridades sindicales del mundo en esta reunión, es una reivindicación a las políticas llevadas adelante por la Argentina en los últimos años y que han tenido al empleo y a los derechos de los trabajadores como centro de las políticas públicas.”. Y agregó más adelante: “los trabajadores argentinos estamos de pie para defender el desarrollo productivo y la cultura del trabajo, con el objetivo de mejorar problemáticas como las de la pobreza y la desocupación, que aún nos afectan”.