La Mesa Interinstitucional contra la Trata de Personas de Mar del Plata expresó su profunda preocupación ante la posibilidad de que “Cocodrilo” –como sucursal del famoso pub porteño que está siendo investigado por la Justicia por el delito de trata de personas- abra sus puertas en Mar del Plata.
Esta posibilidad llega a partir de un decreto del intendente, basado en el dictamen del Procurador Municipal de agosto de 2015, que viene a modificar otro de junio de 2015, el cual prohibía la apertura y funcionamiento del local situado en Aristóbulo del Valle y la costa, cuya habilitación consta a nombre de ALAL S.A. Este nuevo decreto repara en que dicha prohibición alcanza “exclusivamente al desarrollo de actividades que resulten compatibles con el delito de trata de personas”, algo que resulta evidente, de acuerdo a las ordenanzas y leyes vigentes.
La posibilidad de que allí pueda abrir “Cocodrilo” la dejó entrever el propio titular del comercio, Omar Suárez, quien a través de distintos medios de comunicación celebró y agradeció la medida, aunque puso en duda –al menos por ahora- la apertura del local en la ciudad.
Entendemos que de esta manera se permite que “Cocodrilo” desembarque en nuestra ciudad, tal como se intentó hacer el año pasado y encontró con una fuerte respuesta de rechazo de la sociedad, de esta Mesa, de la administración municipal e incluso del Ministerio Público Fiscal de la Nación, que presentó nutrida prueba para señalar que “sin dudas la instalación de un lugar que está inequívocamente señalado como de explotación sexual de mujeres, provoca un efecto contrario (a lo establecido por ordenanzas municipales leyes nacionales y pactos y convenios internacionales, que no obligan solo a sancionar la trata sino también a prevenirla)”.
La negativa a que Cocodrilo se instale en Mar del Plata se sustenta en datos objetivos. Actualmente existe una causa abierta en el Juzgado Federal Nº4 de la Ciudad de Buenos Aires, que investiga la posible comisión del delito de trata y venta de estupefacientes. Y “Cocodrilo” –junto a otros- fue denunciado también por la UFASE en 2010, cuando se comprobó la falsedad ideológica de numerosas actas de inspección que debía labrar la comisaría de la jurisdicción. El local fue allanado en marzo de 2011, y de la entrevista con las mujeres encontradas allí, surgió que en el lugar habría unas 20 mujeres denominadas “chicas de sala”, con horario mínimo de permanencia dentro del lugar allanado, que harían pases con los clientes/prostituyentes fuera del local. Todo ello fue respaldado por constancias aportadas oportunamente al Municipio, que incluye artículos periodísticos, sitios de “guías de sexo” y hasta foros de prostituyentes.
Debe dejarse en claro que esta Mesa no se opone a las inversiones que puedan realizarse en la ciudad y que generan trabajo a la población, pero de ninguna manera puede permitirse que ello implique la vulneración de normativas internacionales y el establecimiento de “comercios” que lucren con la explotación y cosificación de las personas, especialmente de mujeres y niñas.
Por todo lo expresado, es que la Mesa Interinstitucional contra la Trata de Personas de Mar del Plata reclama al intendente del Municipio de General Pueyrredón que cumplimente los compromisos asumidos por él mismo de combatir la violencia de género, la explotación sexual y la trata de mujeres, tal como lo expresara en junio de 2015 en el marco de la realización de la primer marcha ”NiUnaMenos”; lo ratificara en el debate de candidatos a la comuna, al que si bien no concurrió, remitió nota personal adhiriendo a la totalidad de los puntos marcados por este Mesa; y lo reafirmara meses atrás cuando nos recibiera en su despacho municipal, al comprometerse con la lucha que llevamos adelante.
Por último, solicitamos tanto al Poder Ejecutivo local como al Concejo Deliberante que expresen claramente su oposición a la llegada de “Cocodrilo” a Mar del Plata, o a la explotación de esta marca, en pos de prevenir situaciones de explotación sexual y trata de personas. Como ciudad ya nos hemos puesto de pie para frenar estos delitos, sabemos que General Pueyrredon es un partido que por sus condiciones turísticas y portuarias de algún modo es proclive al establecimiento de prostíbulos y privados, y es por eso que necesitamos aunar esfuerzos para que esta lucha sea efectiva y colectiva.
Como Mesa nos manifestamos en estado de alerta.