Preocupación de SUTEBA

Autoridades educativas y gremiales pidieron ser recibidos por el juez que clausuró el edificio de las escuelas 2 y 46 para plantearle si es posible realizar las obras sin que ello implique cerrarla.

La historia de las escuelas 2 y 46 sigue sumando capítulos. Primero, por orden judicial, el edificio de Dorrego al 600 fue clausurado por 90 días a raíz de los severos problemas de infraestructura que habían denunciado los padres de los alumnos y que luego corroboró un juez.

El magistrado exhortó, además, a las autoridades educativas a buscar en el término de 96 horas un lugar alternativo para que los chicos pudieran terminar el ciclo lectivo. Aunque ese lugar apareció pronto -los estudiantes de primaria fueron a la escuela 5; los de la secundaria a la Piloto-, la solución no fue del todo satisfactoria: en el primer caso, los menores terminaron amontonados en un gimnasio; en el segundo, con rotación de horarios y aulas para poder cursar.

En consecuencia, se evaluó otra posibilidad: que la comunidad educativa fuera destinada de manera provisoria a los edificios donde funcionan las primarias 58 -Santiago del Estero y Avellaneda- y 79 -en el barrio 2 de Abril-. Esta nueva oferta tampoco trajo tranquilidad a padres ni a docentes a los que se les complica recorrer importantes distancias para asistir a clases.

En este contexto, los integrantes de la Unidad Educativa de Gestión Distrital (UEGD), compuesta por autoridades distritales y representantes de los gremios docentes, se declararon en estado de “asamblea permanente” y convinieron solicitar una audiencia al juez que decidió clausurar la escuela 2. “Queremos saber los alcances del fallo; el motivo del plazo del cierre y si es posible que las obras se hagan por partes, sin que ello impida que los chicos asistan a clases”, explicó Susana Aranguren, secretaria adjunta del Suteba local y miembro de la UEGD.

Tras insistir en que aún desconocen los pormenores del fallo judicial, la dirigente gremial evaluó que el plazo impuesto por la justicia “es muy extenso” y por eso, contó, buscan ser convocados “para analizar diferentes situaciones”.

“El traslado de los chicos y los docentes a 2 de Abril genera muchos inconvenientes, no sólo a las familias que viven cerca de la escuela 2, sino a los docentes que tienen horas en otros establecimientos del centro o barrios más alejados se les generan incompatibilidad de horarios”, advirtió . También negó que el hecho de de que se les facilite un medio de transporte pueda traer alguna solución al problema. “No es tan fácil llevar y traer tantos chicos, ni hacer distancias tan grandes”, analizó.

A su vez, Aranguen evaluó que pese a que en la resolución se pide “garantizar la continuidad pedagógica” de los alumnos, “nada de eso ocurre”. “Hoy por hoy, los chicos están en un gimnasio, sin pizarrones, todos juntos o rotando de curso en curso”, subrayó.

En ese sentido, la representante del Suteba afirmó que la situación “sigue siendo preocupante” y apeló a la «buena voluntad» de las autoridades de Educación para resolverla.