En el Frente de Izquierda y los Trabajadores el objetivo sigue siendo ingresar por primera vez en su historia al Concejo Deliberante. El 3% de los votos hace que el objetivo aparezca lejano. Para lograrlo, intentarán mantener mantener lo cosechado en las primarias. «Creemos que ese ya es nuestro piso pero con la polarización que se puede producir en octubre nada está asegurado», afirman.
La campaña estará concentrada en marcar la deficiencia del gobierno de Arroyo y demostrar que la oposición está integrada por caras que ya pasaron por el Concejo y no produjeron cambios. «Vamos a insistir con la importancia de que la izquierda tenga representación para que haya una voz distinta», sostienen.