El pedido de la central obrerá será entre $600 y $3.000 y es para “compensar la inflación”. Los sindicalistas siguen reclamando por la modificación del piso del Impuesto a las Ganancias.
La CGT más cercana al Gobierno pedirá un adicional salarial de entre 600 y 3.000 pesos para fin de año para afrontar el costo inflacionario y el peso del Impuesto a las Ganancias en los casos de los sueldos más altos. Postura que ya había sido adoptada por gremios como la Asociación Bancaria y el de Luz y Fuerza.
El pedido de este plus se basa en la suba de precios y en el impacto de Ganancias, que este año conservó el mínimo no imponible.
Este año, el metalúrgico tuvo que conformarse con que el Ejecutivo atendiera solamente los reclamos por la deuda de las obras sociales gremiales y la suba del Salario Mínimo Vital y Móvil.
La gratificación extraordinaria también es exigida por el sindicalismo opositor. Gremios de la CGT de Hugo Moyano, como los panaderos, ya les hicieron saber a los empresarios de esa iniciativa. De la misma manera lo harán los de la CGT Azul y Blanca, de Luis Barrionuevo.