Se produjo un hecho curioso, ya que un agente de la Dirección General de Tránsito,concurrió para ampliar su categoría y poder estar a bordo de una de las grúas municipales.
Hasta aquí nada fuera de lo habitual, pero el hecho fue que tuvo que concurrir con otro compañero, la grúa y un vehículo simulando un acarreo en la vía pública.
El examinador Pablo García, acompañado por el responsable de los exámenes teórico-prácticos Alejandro Saavedra, dialogó con el aspirante durante algunos minutos y luego subió al rodado en cuestión para realizar la prueba de manejo.
Con el auto «secuestrado», instructor y empleado de Tránsito, tomaron por la avenida Juan B Justo hacia Champagnat. Realizaron toda la rotonda y retomaron por calle Matheu hacia México.
Finalmente, frente a los galpones de Grúas Bianchi, se realizaron las maniobras de estacionamiento y recién luego se resolvió la situación del aspirante.