“Mientras crece la incertidumbre y preocupación en el comercio, insólitamente, vendedores ambulantes compiten por el uso del espacio público”, indicaron desde UCIP. Piden la intervención del municipio para frenar el avance de la venta ambulante en distintos puntos de la ciudad.
Tras el avance de puestos de venta ambulante en distintos puntos de la ciudad y los hechos de violencia entre vendedores de Plaza Rocha y trabajadores de Inspección General, desde UCIP reclamaron al municipio el respeto por el espacio público y la competencia desleal.
“En estos últimos años vimos avanzar -producto de la pandemia y luego de la situación económica y social- la venta en espacios públicos como plazas o veredas de calles y avenidas, en puestos fijos por “supuestos vendedores ambulantes”, señalaron desde la Unión del Comercio, la Industria y la Producción.
“Debemos diferenciar la economía social, feriantes y artesanos, con vendedores que “sin ambular” ocupan un espacio público en beneficio propio, mientras cientos de comerciantes de la ciudad se encuentran en una situación cada vez más preocupante e incierta. Y deben ver además, esta proliferación del comercio desleal, que, por el origen y tipos de productos, distan mucho de una economía social o artesanía”, aclararon mediante un comunicado.
Ante ello, solicitaron la intervención y control del municipio. “La UCIP viene desde hace años solicitando la intervención del estado para ordenar esta ocupación del espacio público, y que lo público sea público y la actividad privada se instale en espacio privados. No obstante, ya hasta crecen conflictos entre los mismos vendedores ambulantes por el uso del espacio público”, recalcaron.
En esa misma línea, UCIP hizo hincapié en que “quedamos perplejos, ya no solo por la naturalización de las situaciones de ocupación de espacios públicos, sino también que cuando el estado interviene se lo tilde de “hostigamiento” por el solo cumplimiento de su función”.
“Muchos comerciantes de cercanía con la Plaza Rocha, como los centros comerciales San Juan y Microcentro, vienen desde años reclamando la situación de este espacio tomado para la comercialización de productos que compiten con similares productos a los ofrecidos por comerciantes que pagan alquiler, impuestos, sueldos, cargas sociales, aportes sindicales, en infinidad de conceptos para quienes están instalados en locales comerciales privados llegando hasta derechos superpuestos por la musicalización como son SADAIC, AADI, CAPIF, etc.”, agregaron.
Finalmente indicaron que “también quienes ven achicadas las aceras o zonas peatonales, con puestos improvisados pero permanentes y reiterados diariamente, y productos industriales o hasta importados -como la venta de alimentos o anteojos- en muchos casos infringen también varias leyes de salud, impositivas y hasta aduaneras”.