El titular de la central obrera oficialista, aseguró que esperan la respuesta del Gobierno a sus reclamos y que luego «se actuará en consecuencia». Sin embargó, aseguró que «no se está hablando de paro, sino de que se solucione este problema».
El secretario general de la CGT Alsina, Antonio Caló, advirtió que si el Gobierno no da respuesta a los reclamos planteados por la central obrera actuarán «en consecuencia», aunque aseguró que no evalúan un paro. «Si la cancha está embarrada hay que jugar con los tapones altos», disparó.
Caló dijo que en el encuentro que los sindicalistas mantuvieron con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, «se tomó nota de nuestros pedidos y nos pidieron 10 días». «Veremos qué nos contesta, las circunstancias están así, si la cancha está embarrada hay que jugar con los tapones altos. Los compañeros en el último Consejo Directivo que hicimos estaban enojados», afirmó.
El metalúrgico avisó que «después de lo que conteste el Gobierno decidiremos en consecuencia», aunque señaló que «no se está hablando de paro, sino de que se solucione este problema».
Asimismo, Caló consideró que «sería irresponsable renunciar a la CGT si el Gobierno no responde los reclamos».
«Los compañeros estaban más preocupados por las suspensiones y la falta de trabajo, lo más triste que hay es cuando un laburante llega a su casa y le dice a su familia que lo despidieron», expresó Caló. Y agregó: «Lo que estamos hablando con (el ministro de Trabajo, Carlos) Tomada es que no se pierdan los puestos de trabajo».
Por otro lado, se refirió a las declaraciones del jefe de Gabinete quien consideró que los reclamos por el incremento del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias «pueden intensificarse o no por carácter político» porque los trabajadores y jubilados que no estaban alcanzados por este impuesto «siguen sin estarlo, independientemente del incremento de su salario» por las paritarias.
«Hay que preguntarle a Capitanich porqué dijo que el reclamo por Ganancias es político», aseguró Caló